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Acerca de #mitrabajo: #perspectivas de un #bibliotecario

Queridos lectores:

En esta ocasión me complace compartirles un texto creado e inspirado en la labor bibliotecaria de una estimada colega, Jimena Rey, autora de estas líneas y a quien agradezco muchísimo por permitirme postearlo en este espacio, ya que me agradó bastante la manera en que describe las funciones que muchos de nosotros hacemos.

Sin más, se los dejo acá abajo, y no duden en dejar sus comentarios y felicitaciones para Jime.


Gracias por leer.

SB


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Acerca de mi trabajo


Hay algo de coleccionista en el bibliotecario. En ese mood, a la colección hay que buscarle huecos y tratar de llenarlos, rastrear títulos nuevos, sumar ediciones sugerentes o completar las obras a las que les falte algún volumen.


También tiene algo de administrador de un pequeño negocio: se preocupa porque el changarro esté limpio, porque funcionen las computadoras, que haya luz suficiente, que todo quede bien cerrado o se reparen las cosas que dejaron de funcionar. Por supuesto, una tarea importantísima en esta misión es cuidar los libros, arreglarlos si algo les pasa, quitarles la camisa, doblarla y guardarla muy bien. Guardar y guardar, guardar y saber dónde quedó todo guardado.


Los bibliotecarios dicen ser muy organizados, o al menos es una de las cosas que se espera de ellos. También se espera que lo tengan todo, que lo conozcan todo, que guarden las referencias en la cabeza por mucho tiempo, como si el cerebro bibliotecario viniera de fábrica con el catálogo incrustado y entonces bastara con pronunciar la palabra clave para que la máquina trabajara y arrojara los resultados.


Lo que yo espero de ellos es que me den lo que quiero y luego me dejen en paz. Eso sí, que me lo den con gusto, sonriendo, con muchas ganas de dármelo. A los bibliotecarios nos encanta tener lo que nos piden. Se siente bien. Pero cuando no, cuando no tienes lo que te piden, se siente una deuda profunda, una extraña sensación de vergüenza; para quitársela lo mejor es conectarse rápido con la siguiente tarea.


Y claro, también hay en nosotros algo de dealer enganchado con las demandas de su público conocedor.


Rosa Jimena Rey


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